La comprensión de que todo es ilusión incluye muchas capas bien diferenciadas según su propia práctica se va desarrollando con el tiempo.
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Cuando comienzas a practicar y meditar comienzas a reconocer una sutil ilusión: todas las proyecciones de los pensamientos y como todo transmite su propio eco. Todo es una ilusión, pero todavía no existe un auténtico impulso y aceptación.
Luego, un poco más tarde, lentamente, mientras continúas practicando yoga, practicando meditación, practicando con la deidad, vas desarrollando una completa y auténtica confirmación desde el corazón con la plena confianza de que todo es la apariencia de una ilusión.
Por eso, no hay nada hacia lo que avanzar, no hay nada de lo que retroceder, no hay aferramiento, no hay miedo y no hay expectativa.
En ese momento ya no hay expectativas, uno se siente realmente feliz y no pide nada más. Uno se queda realmente sin palabras.
Kalu Rinpoche
Preguntas y respuestas Facebook – 28 de junio de 2020
Domingo a las 3.30 p.m.
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